
4 días en una de las islas más bonitas del archipiélago canario, concretamente en La Palma, dan para mucho. Si te sabes organizar bien, o si por el contrario, te gusta improvisar, como nosotros, 4 días son más que suficientes para un primer contacto….digo primero, porque no será la única vez que vuelvas a visitarla.
La Palma te deja con sabor a más, ver más amaneceres y atardeceres, conocer más sobre su historia y su cultura, descubrir pueblos tan entrañables como Garafía, sus bosques frondosos y de un verde tan vivo que parece que tienen un filtro de Instagram….
Te voy a contar qué pueblos visitamos y dónde comimos en esos 4 días, así como algunas recomendaciones, empezamos el viaje:
Día 1:
– El domingo llegamos sobre las 12:00 a.m a Santa Cruz de la Palma. En un primero momento dudamos si quedarnos en la capital y ver sus preciosas calles y casas o bien, continuar hacia Los Llanos de Ariadne, donde habíamos alquilado la casita (haz click aquí para ver dónde nos hospedamos ). Finalmente decimos continuar hacia los Llanos para dejar las maletas y estar más relajados.
Tras dejar todo en la casita, como era justo la hora de comer, miramos en Trip Advisor restaurantes cerca de la zona y al mismo tiempo pregunté a una amiga palmera dónde comer, nos recomendó «Bodegas Tamanca«, un restaurante de carne (aunque también tiene pescado). Lo recomendamos al 100%, no sólo se come de lujo sino que la atención al cliente es impecable, allí comí los mejores chocos que he probado hasta ahora «riquísimos» 🙂
El lugar esta acondicionado, las mesas están dentro de una bodega y me llamaron mucho la atención las lámparas redondas, decoradas con botellas de vino de diferentes colores, como pueden ver en la siguiente foto.

Tras almorzar, como estábamos un poco cansados del viaje, decidimos ir a la casita a descansar y luego bajar a la playa de Puerto Naos, nos habían dicho que los atardeceres eran preciosos y no se equivocaban, es todo un espectáculo. La playa está genial tanto para niños como para adultos, la temperatura del agua nos sorprendió, de hecho nos bañamos hasta las nueve de la noche y fue todo un lujo disfrutar juntos de un magnífico atardecer.
En la siguiente foto pueden ver nuestras vistas esa noche, ¡la naturaleza nunca dejará de sorprenderme!.

Día 2:
El segundo día teníamos claro que queríamos ir en busca de aventuras, visitar la Caldera de Taburiente y hacer algún sendero…así que nos levantamos temprano y fuimos a desayunar a «Café Idafe» en el centro de Los Llanos. Totalmente recomendado si quieres tomar un desayuno tipo «brunch», ideal para coger fuerzas e ir a hacer algo de deporte al monte.
El desayuno nos gustó tanto que volvimos a ir el último día a desayunar, ¡recomendado! 🙂

Un apunte que tienen que saber: para visitar la Caldera de Taburiente y subir al mirador por Los Llanos, hay que registrarse primero en el Centro de Visitantes o por Internet en la web www.reservasparquesnacionales.es, ya que sólo permiten estar 20 coches arriba, otra manera de acceder es ir caminando desde la barrera hasta el mirador, unos 6 km en total y ¡si!, nosotros no nos registramos así que decidimos subir caminando.
Una vez arriba hay diferentes rutas que puedes hacer, nosotros decidimos hacer una circular de unos 3 km aproximadamente, la ruta de la Cumbrecita y admirar la belleza del paisaje. Estando arriba conocimos a un grupo de turistas que venían de Málaga y Cádiz, muy simpáticos ellos y sorprendidos de que hubiéramos subido caminando desde la barrera. A continuación, pueden ver algunas fotos de la caldera, ¡parece sacada de un lienzo!.
Para bajar podíamos hacerlo por el mismo sitio por donde subimos o bien, bajar por la montaña por el Camino de los Riachuelos, otros 6 km de sendero llenos de vegetación, preciosos paisajes y pura naturaleza. Este camino va bordeando todos los barrancos hasta llegar a la barrera, y si te gusta el senderismo es totalmente recomendable.
Allí pudimos almorzar unos bocadillos que habíamos llevado, mientras estábamos sentados en un mirador, no podría explicar con palabras, lo que se siente admirando la belleza de ese paisaje. Les cuento una anécdota, una de las cosas que más me llamó la atención es que había cuervos y eran muy osados, puesto que cuando me estaba terminando de comer el bocadillo, uno se posó justo encima de nosotros, en la rama de un pino y era un animal tan grande que nos asustó y salimos corriendo jajajaja, ahora me río pero nos llevamos un buen susto ya que no nos esperábamos esa visita.
El resto del día lo pasamos en la playa de Puerto Naos y esa es una de las cosas que más gusta de Canarias, poder estar en la montaña y en la playa el mismo día, ¡qué afortunados somos, tenemos el paraíso aquí!.
3 Día:
El tercer día queríamos visitar Los Tilos y luego dar una vuelta a la isla por la zona norte con el coche. Los Tilos es un bosque maravilloso, la laurisilva lo envuelve, lo rodea y hace de él un lugar con mucha magia, parece que en cada esquina te va a salir un duende o un elfo. Este bosque se encuentra en el municipio de San Andrés y Sauces, allí tras hacer una sendero de unas 2 horas, decidimos dar la vuelta y bajar para almorzar en un restaurante que se llama «El Canal», también nos encantó, perfecta atención al cliente y la comida muy rica.

Nos quedamos con las ganas de seguir caminando pero como queríamos ver más cosas de la isla, decidimos continuar con el coche. La siguiente parada fue en La Laguna de Barlovento, hace unos 5 años yo fui con mi padre y mi hermana de acampada y nos encantó, esta vez quería enseñársela a Jorge y se las quiero recomendar. Es un parque recreativo precioso, donde puedes pasar el día o quedarte de acampada, tanto en caseta de campaña, en caravana o en una casa de madera, el cómo lo decides tu. Créanme que es un lugar de diez para este tipo de actividades, rodeado de naturaleza y con unos amigos muy simpáticos, como pueden ver en la siguiente foto.

El resto del viaje por la Palma lo continuamos en carretera atravesando municipios como Garafía, este último nos llamó muchísimo la atención porque tiene mucho encanto, las casas canarias y coloniales con preciosas y está situado en una zona privilegiada, si miras hacia la montaña parece que estás en Los Alpes o en algún pueblo suizo, si miras hacia el mar, la inmensidad que se abre ante ti te abruma…
Nos quedamos con muchas ganas de recorrernos sus calles y hablar con algún anciano del pueblo, que nos contara un poco la historia y anécdotas de antaño..pero íbamos con el tiempo justo, así que tenemos otra excusa para volver.

4º Día:
El último día en la isla bonita, tras desayunar de manera contundente en «Cafe Idafe«, pusimos rumbo a la capital, a Santa Cruz y allí estuvimos toda la mañana recorriendo la Calle Real, admirando las fachadas de las casas canarias, sus característicos balcones y también tuve mi mi momento para entrar a alguna tienda y comprar 🙂
Ultima recomendación de ese día, visitar «El Café de Don Manuel«, me lo recomendaron y yo se los recomiendo a ustedes, buen café y las tartas riquísimas.

Y hasta aquí nuestro viaje de 4 días a La Palma, si tu también la has visitado me gustaría que me recomendaras algún sitio, restaurante, cafetería, sendero, etc que crees que deberíamos visitar la próxima vez. Si por el contrario, viendo este post te has animado a visitar la isla bonita, cuéntamelo en los comentarios, ¡feliz semana!.