En este post les hablaré de los ladrones del tiempo, aquellos factores que nos distraen de nuestras tareas diarias y que nos retrasan a la hora de alcanzar las metas que nos hemos propuesto.
Mi mayor ladrón del tiempo es el móvil: debido a mis perfiles en las redes sociales y mi trabajo creando contenido, dedico muchas horas al día al móvil pero es cierto que cuando estoy trabajando muchas veces «me pierdo» mirando otros perfiles o viendo vídeos de mascotas jajajaja, entre otras cosas. Cuando me sucede esto y me doy cuenta a veces han pasado alrededor de 15 minutos, otras veces incluso más y al final si sumo todo ese tiempo mirando el móvil, perfectamente puedo decir que he perdido una hora de mi día a «no hacer nada productivo».
Cuando digo móvil también puedo decir ordenador o tablet, que son dispositivos de trabajo pero que pueden convertirse en todo lo contrario si abrimos los perfiles de plataformas como Facebook, Pinterest o Twitter. Es importante marcarte un límite y no abrir estas plataformas cuando estamos trabajando.
La televisión es otra ladrona del tiempo. En nuestro caso particular tenemos tele en casa pero no funciona, en estos cuatro años que vivimos juntos no hemos sentido la necesidad de verla y menos perder el tiempo con programas que no aportan nada. Si queremos ver alguna serie o película, utilizamos el ordenador.

He estado explicando ladrones del tiempo tecnológicos pero hay otros diferentes como «La falta de organización«: es muy importante planificar y dedicar unas horas a la semana a organizar los días siguientes. Debes establecer unos objetivos claros y alcanzables y definir las acciones que llevarás a cabo para conseguirlos.
Procastinar es una ladrona del tiempo, es decir, aplazar las tareas que no te gustan o te causan pereza. ¿Y si comenzamos al día haciendo las tareas que menos nos gustan?. No sólo nos las quitaremos de encima sino que disfrutaremos más del resto de actividades más placenteras.
Las notificaciones casi se llevan el primer puesto en la lista de ladrones del tiempo y es que estas interrupciones nos hacen parar la actividad que estamos realizando para prestarles toda nuestra atención. ¿Qué me ha funcionado?: desactivar todas las notificaciones de las aplicaciones y cuando tengo que trabajar, poner el móvil en modo avión. Así me aseguro que no me van a interrumpir, pruébalo y verás que le coges el gusto a tener el móvil siempre en silencio.
¿Cuáles son tus ladrones del tiempo?, ¿has conseguido ponerles límites?.